Mes: octubre 2017

Ya lo dijo John Lennon: Imagina que no hay países… excepto Cataluña, por supuesto. En un hospital barcelonés mis colegas se congregan para cantar el himno de quien quiere borrar fronteras, reivindicando precisamente el levantar fronteras nuevas; el himno de la hermandad entre los hombres para disolver los lazos de hermandad de un país… Lennon pedía imaginar que no existiera el infierno, otros lo inventan en su historia; Lennon pedía imaginar que no existiera el Paraíso, otros prometen su particular y falsa Arcadia; Lennon imaginaba a la gente viviendo su presente, ese presente que ahora es lo que menos les importa mientras cantan Imagine. De verdad que no lo entiendo, o bien al que se le ocurrió la idea del video precisamente con esta canción no se le da bien el inglés, o bien se cree su propia propaganda y piensa que los que no entendemos ni inglés ni apenas el castellano somos el resto de los españoles. ¿De verdad cantáis a la hermandad entre los hombres cuando estáis luchando por repudiarnos como hermanos? Que hubiese muchos soñadores podría ser bueno, el problema viene cuando comparten la misma pesadilla. Sinceramente, visto lo visto, prefiero la versión de Imagine de Tomás Roncero.

El personal mèdic i d’infermeria de l’Hospital Clínic de BCN canta un emocionant «Imagine» a l’entrada del centre sanitari. pic.twitter.com/DVIG4mV4zp

— SER CATALUNYA (@SERCatalunya) 3 de octubre de 2017

La equidistancia es una falacia, como tampoco se podría ser neutral ante un caso de maltrato machista, por ejemplo. El gobierno ha sido muy torpe, ha pretendido jugar al póker de farol contra unos tahúres con las cartas marcadas, pero los que han empujado a esta situación tenían todos los detalles planeados, no sólo los puramente logísticos para su pseudoreferéndum asambleario. Ser equidistante es tomar partido y es injusto.